Seiscientos millones de
ángeles alababan con libertad al glorioso Dios y Creador hasta que el bello
Luzbel planificó un golpe de Estado o algo parecido. Lamentándolo mucho, el
sumo Hacedor condenó irreversiblemente a Lucifer y a los doscientos millones
que le siguieron. Libremente adoraron al Señor y libremente se extraviaron, por
siempre. Entonces la Santísima Trinidad creó al ser humano para que llenara los
cupos que quedaron vacíos en el estadio. Adán libremente cruzó el puente que lo
conducía del reino de Dios al reino de las tinieblas. Hoy el puente que
transporta a los hombres de la oscuridad a la luz se llama Jesucristo. Lo
curioso que antes de la creación del primer ángel el libro de la historia de la
humanidad y el de la vida, ya estaban escritos y cerrados.
Del blog índice LAS
SOTANAS DE SATÁN
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