EL LIBRO DEL TAO ELEVADO:
TAO TE KING, de LAO TSE.
Parafraseándolo, elevo el Libro del
Tao a nuevas alturas.
Tao 1
El Tao que puede ser explicado,
definido,
amado o revelado no es el Tao
sempiterno,
porque no posee sentido, ni ton ni
son.
Llamo no-Ser a ese principio antes de
la creación.
Llamo Ser supremo al Creador,
de todo aquello que ves y no ves.
El sendero al no-Ser es una
verborragia aquilatada
que te clava a la esencia de la
barahúnda.
La teología del Ser comienza desde el
no-Ser.
El Espíritu se une al espíritu humano
y el alma regresa al inicio de todo,
al huerto,
a través de los misterios y maravillas
de la fe.
Tao 2
Cuando el hombre se encadena a la
belleza interior
la verdadera fealdad emprende la
retirada.
Cuando el hombre se llena de luz y
bondad
no le queda espacio para la oscuridad
y el mal.
Desde el no-Ser el Ser en generó todo.
La genuina bondad es absoluta,
totalizante.
Lo difícil y lo fácil dependen del
talento y el ánimo,
lo largo y lo corto, el uno y el otro,
se determinan,
lo alto y lo bajo se ubican
respectivamente,
la voz y el tono se acuerdan entre sí,
el antes y el después se siguen
consecuentemente.
El atenerse a no-obrar es un obrar
singular,
el enseñar sin palabras es una gran
obra.
El genio
humano puede crear la más bella poesía
y modificar
el pensamiento y el curso de la historia.
Los seres
van a Él por motivos sobrenaturales,
y es el
dueño de lo material e inmaterial,
y todo
mérito y gloria le pertenecen a Él.
El
quietismo es la antípoda del crecimiento global.
Tao 3
La
sabiduría proviene del Cielo,
hay que
experimentarla,
y el
talento lo entrega la gracia divina.
La sana
competencia enriquece el juego, al equipo.
Los objetos
preciosos son fatuidad,
la codicia
prostituye el alma.
El sabio
trasvasija su corazón al Todopoderoso.
Administrar
mal el talento es un desperdicio
y la
entropía y los muchos ronquidos empobrecen.
Tao 4
produciendo
una dicha desbordante;
es un
abismo sin fondo, sempiterno,
y el
ancestro de toda cosa.
No posee
asperezas ni enredos
porque es
brillo y perfección sublimes:
su
esplendor ilumina los siglos de los siglos.
Esto es
profundo, misterioso e impactantemente real.
El Hijo es
el enviado.
Nada es
anterior al eterno Dios.
La santidad
desenmascara al ruin.
Tao 5
En la tierra
no hay humanidad,
amor al
prójimo.
Los hombres
se tratan como perros de paja.
El cielo y
la tierra son el escenario de la acción
del reinos
de los cielos, del plan de restauración.
Ante Él el
discurso termina,
por eso más
vale guardar Su palabra.
Tao 6
Desde el
valle del vacío
todos los
cuerpos y seres fueron elaborados,
como con el
amor de una pía madre.
El vacío es
la raíz del universo,
que como un
reloj,
es guiado y
protegido por el Relojero,
hasta que
se cumpla con lo profetizado.
Tao 7
El cielo y
la tierra no duran desde siempre
y no viven
para sí mismos.
Durarán
hasta que se cumpla el propósito.
Por eso el
sabio es un servidor;
excluye a
su persona del orgullo
y siempre
se halla en el primer lugar.
Él se
entregó a sí mismo
y por eso
permanecerá.
Porque el
amor no busca lo suyo:
cumple con
su finalidad.
Tao 8
La bondad
suprema es como el agua.
La virtud
del agua es la de beneficiar a todos sin distinciones
y
permanecer con sencillez en los lugares bajo la tierra.
Actuando
así es la imagen de la Luz.
Por eso el
sabio
para su
morada ama la tierra, temporalmente,
en su
pensamiento es profundo,
en el don
procede con amor,
en su
palabra se atiene a la verdad revelada,
en el
gobierno busca la paz,
en sus
quehaceres procede con habilidad,
en sus
actos busca la oportunidad
y porque
rivaliza con los demonios y las ofensas,
la
oscuridad todo se lo reprocha.
Tao 9
Poseer un
corazón como una copa llena
que rebosa
por los bordes
es posible.
Usar
habitualmente una herramienta
y querer
tenerla siempre afilada
sin la
debida restauración,
no podrá
durar mucho tiempo.
Cuando el
oro y el jade llenan tu casa
no podrás
mantenerlos seguros.
Quien
siendo rico y poderoso se vuelve soberbio
acarrea su
propia ruina.
Retirarse
gozoso de la obra bien acabada
es lo que
hace el sendero del cielo.
A cada día
su propio afán.
Tao 10
El ser
humano es espíritu, alma y cuerpo;
una trinidad que unida se subyugará al Creador.
Haceos como
un niño, respirad como tal.
Purificar
la visión interior hasta volverla inmaculada.
Que el espíritu
despierto controle tu mente.
Amar a los
hombres
y regir el
Estado maximizando la sabiduría.
Por
mientras la puerta del cielo esté abierta
poblad el
conducto que conduce a ella.
Comprenderás
las cosas con la iluminación.
Producir y
alimentar,
crear sin
poseer,
actuar sin
apropiarse,
ser jefe
entre los hombres sin dominarlos.
Tal es la
misteriosa y sobrenatural Virtud.
Tao 11
Treinta
rayos convergen en el club de una rueda
pero es de
su vacío que depende la utilidad del carro.
Modelando
la arcilla se hacen vasijas
pero es de
su vacío que depende la utilidad de la vasija.
Se horadan
puertas y ventanas para hacer una habitación.
En
consecuencia
así como
nos beneficiamos con lo que es,
debemos
reconocer la utilidad de la invisibilidad
que
transforma lo que no se ve,
sojuzgando
lo material.
Tao 12
Determinados
colores y artificios enceguecen al hombre.
Determinadas
partituras y afirmaciones ensordecen al hombre.
La gula y
el hedonismo embotan al hombre.
Los objetos
preciosos desvían la conducta del hombre.
Por eso el
sabio
alimenta el
ojo del espíritu no el vientre.
Rechaza
esto y toma aquello.
Tao 13
El favor y
la humillación acongojan al hombre.
Lo que nos
honra y lo que nos daña existen
porque
tenemos un ego.
El
compadrazgo es despreciable
y el hombre
que lo recibe algo extravía,
y cuando
pierde el favor se acongoja.
El mayor
sufrimiento es el que maltrata al yo.
La altivez
debería finar.
El que se
ama a sí mismo que no gobierne.
Tao 14
Dirigimos a
Él la mirada pero no lo vemos.
Su Nombre
es omnisciente.
Le
escuchamos atentamente pero no le oímos.
Su Nombre
es omnipresente.
Tratamos de
cogerlo y lo sentimos solamente.
Su Nombre
es omnipotente.
Estas tres
características son inseparables
y ellas se
funden en la Unidad.
Gloria a la Trinidad.
No posee un
aspecto superior o inferior.
Permanece
silencioso
y no
sabríamos como definirlo.
Nos
retornará a la santidad del comienzo de todo.
Forma sin
forma, imagen sin objeto.
En un cara
a cara no vemos su rostro,
que sí está
presente.
Quien se
atiene a la senda apostólica
para
someterse al Ser Supremo
puede
entonces conocer el primordial comienzo.
Tal es el
hilo conductor del Tao o Luz.
Tao 15
Los
profetas de la antigüedad
eran
directos, agudos y profundos,
y todos les
reconocían.
Por eso se
les puede describir en su aspecto interior y exterior.
Cautelosos
como quien cruza un arroyo en invierno,
reservados
como un huésped, a veces,
nunca
indiferentes como ese hielo que se funde,
sencillos
como un tronco de árbol,
vastos como
un valle,
claros como
el río de la montaña.
¿Quién como
ellos derrotan a la oscuridad?
¿quién como
ellos engendran serenidad?
El que
sigue esta vía
no desea la
abundancia de bienes
porque sólo
estando libre de posesiones
se puede
ser humilde,
evitar
compromisos frívolos
y alcanzar
la plenitud.
Sed
subordinados del Espíritu.
Tao 16
Aquel que
lo vacía todo ante Dios
mantiene su
plena serenidad.
De los diez
mil seres que se mueven
puede
entonces contemplar su existencia.
De
cualquier modo que las cosas florezcan,
vuelvan a
la raíz de la cual crecieron.
Volver a la
raíz significa quietud,
quietud
significa volver a la condición original:
volver a la
condición original: esa es la Ley Eterna.
Discernir la
Ley Eterna es estar esclarecido,
no conocer la
Ley Eterna es atraerse la desgracia.
El que
abraza la Ley Eterna
es comprensivo,
siendo
comprensivo es justo,
siendo
justo es regio,
siendo
regio se iguala al Cielo,
igualándose
al Cielo se conduce conforme a la
Luz ,
conduciéndose
conforme a la luz es eterno,
y durante
su vida será salvo.
Tao 17
De los
buenos soberanos apenas se supo que existieron.
Los
sucesores de éstos fueron amados y alabados,
los
sucesores de éstos fueron temidos,
los
sucesores de éstos fueron despreciados.
Con los
años extraviaron la integridad, la humildad.
Confía en la Virtud y síguela,
no tengas
miedo de hacer y someterte al Bien.
Tao 18
Cuando el
Tao fue olvidado
gracias a
la sabiduría,
aparecieron
las enseñanzas sobre la virtud y la equidad.
Cuando la
inteligencia y el saber prosperaron
disminuyeron
las falsedades.
Cuando los
parientes próximos se enemistaron
aparecieron
los ideales de la piedad filial
y el amor
paternal.
Cuando el
Estado cayó en la anarquía
se confirmó
el ideal del ministro fiel.
Tao 19
No rechaces
la sabiduría ni la ciencia
y el pueblo
se beneficiará cien veces.
No rehaces
la moral ni la justicia
y el pueblo
volverá por sí mismo
a la piedad
filial y al amor paternal.
No rechaces
la habilidad y la prosperidad
y habrá
menos ladrones y bandidos,
pues estas
cosas no son simulacros.
Por eso
cuida también que los hombres
puedan
recuperar su confianza:
que sean
profundos y de respiro sobrenatural,
y que
reduzcan su egoísmo y moderen sus ímpetus.
Sí existe
un puente de regreso
a la Virtud original o huerto
del principio.
Tao 20
Entre el
Bien y el Mal
existe una
gran diferencia, un abismo.
Son dos
polos opuestos, dos reinos,
con un
único puente.
La soledad
es el vacío del alma
y durará
todo el tiempo que estés sin Dios.
Todos los
hombres se regocijan
cuando
valoran el Gran Sacrificio,
como cuando
suben en primavera a las terrazas.
Sólo yo
estoy indeciso sin que un signo
me haya
aparecido como un recién nacido
que aún no
sabe sonreír,
inquieto y
errante como un vagabundo.
Todos los
hijos tienen en abundancia,
sólo yo
parezco un desheredado.
Mi corazón
es como el de un insensato, confuso y sombrío.
Los hombres
vulgares que claman son esclarecidos,
sólo yo
parezco obtuso.
Los
mundanos son vivaces y parecen seguros,
yo en
cambio parezco deprimido,
agitado
como el océano,
arrastrado
a la deriva sin cesar.
Todos los
hombres algún talento espiritual,
sólo yo
estoy ocioso como un mendigo,
pudiendo
ser un vasallo laborioso de la
Luz.
El hombre
que es diferente es aquel que valora
el sustento
y poder del Gran Sacrificio.
Tao 21
El
contenido de la Virtud
procede
enteramente de la luz.
El demonio
anima la oscuridad y el caos,
las
imágenes oscuras y caóticas,
el proceder
oscuro y caótico.
Misteriosa
e insondable es la esencia,
absolutamente
verdadera, que habita en Él.
En esa
esencia reside la confianza, el rescate.
De todo
tiempo hasta hoy
no se ha
podido prescindir de Su Nombre.
Pues todo
comienza en Él, con Él.
¿De dónde
me viene éste conocimiento
de la
naturaleza de las cosas?
Del
Creador, de las mismas.
Tao 22
Lo incompleto
será completado,
lo torcido
será enderezado,
lo vacío
será colmado,
lo viejo
será renovado.
Quien tiene
poco por dar, recibirá.
Quien tiene
mucho, perderá.
Por tanto,
el sabio abraza la unidad,
la fusión
con el Padre,
y se vuelve
un modelo para el mundo.
No busca
brillar y por eso resplandece.
En su
persona procura hacerse nada
y de ahí su
magnificencia.
Esta libre
de vanidad
por eso
puede realizar su obra.
No se
exalta y por eso es exaltado.
Con nadie
compite,
por eso
nadie pude competir con él.
El viejo
adagio: “Lo incompleto será completado”,
no es una
profecía vana.
En Él se
expresa la plenitud verdadera;
es un
testimonio de transformación.
Tao 23
Hablar poco
es lo normal.
Un vendaval
no dura una mañana
ni una
lluvia torrencial un día entero.
¿Quién los
produce?
El cielo y
la tierra.
Y si el
Cielo y la Tierra
no pueden hacer
nada
durable cuanto menos
¿lo podrá
el hombre?
Quien sigue
el fulgor
se
identifica con el fulgor.
Quien se
atiene a la virtud
se hace uno
solo con la Virtud.
Quien
pierde el fulgor
se
identifica con los otros extraviados.
Quienes
siguen a la divinidad
son
recibidos por sus hermanos de credo.
A quien se
atiene a la Virtud ,
los hombres
de la Virtud
se regocijan en recibirlo.
Los
extraviados se regocijan con los extraviados.
Por eso el
hombre de poca fe
no recibirá
los beneficios de la fe.
¿Qué es el
hombre sin fe?
Tao 24
Quien se
alza en la punta de los pies
pierde la
estabilidad.
Quien da
grandes zancadas
no avanza.
Del mismo
modo quien se exhibe
no es
esclarecido.
Quien
procura destacarse
pierde su
reputación.
Quien se
jacta
no puede
realizar exitosamente su obra.
Quien se
enorgullece de lo que hace
no realiza
nada perdurable.
Éstos,
desde el punto de vista del Creador
son como
restos de comida y tumores purulentos.
Cosas que
todos aborrecen.
Por eso el
hombre de Dios
se aparta
de tales caminos.
Tao 25
Hay un solo
ser perfecto.
Antes de
que el cielo y la tierra fuesen, él ya era.
Aparentemente
silencioso y solitario.
oh cuan
solitario e inmutable es.
Se desplaza
en todas direcciones sin correr peligro.
Llamésmole,
si se me permite, el gran Hacedor.
Todos
conocen Su Nombre, revelado.
En la
dificultad de darle un verdadero nombre
lo denomino
Todopoderoso.
Todopoderoso
quiere decir que siempre está en movimiento,
que está
siempre en movimiento
quiere
decir que se aleja,
que se
aleja quiere decir que retorna.
El
Omnipresente es muy grande,
el cielo es
grande, la tierra es grande,
y el hombre
pío también es grande.
En el
espacio del mundo hay cuatro grandes
y el hombre
es uno de ellos, cuando renace.
El hombre
sigue la ley de la tierra,
la tierra
sigue la ley del cielo,
el cielo
sigue la ley del Omnisciente
y el
Omnisciente sigue su propia ley.
El hombre
se someterá al Omnipotente.
Tao 26
La gravedad
es la raíz de lo ligero,
la quietud
es el fundamento de la actividad.
Así como un
hombre prudente que viaja todo un día
no se
separa de su pesado fardo de equipaje,
aun en
medio del honor y la gloria
es factible
permanecer calmo y sin inquietudes.
Con cuanta
mayor razón entonces
a las
autoridades les está prohibido
llevar una conducta
alocada o irresponsable,
perder por
ligereza sus propias raíces
y por su
impetuosidad la compostura.
Tao 27
El buen
caminante deja huellas,
el buen
orador refuta el error,
el buen
calculador no necesita máquinas de cálculo,
un buen
cerrajero no emplea trancas ni barrotes,
pero nadie
puede abrir;
un buen
ligador anuda pero nadie puede desatar.
Del mismo
modo el sabio,
salvador
profesional de los hombres,
tiene sus
propios procedimientos.
Se erige en
maestro competente de otros
quienes son
la materia propia de su oficio.
Aspira a
salvar al mundo, por eso depende
de la
gracia y de las cosas del mundo.
Esto es lo
que se llama velar la luz.
El hombre
piadoso no se considera mejor que los otros,
el hombre
malo utiliza o abusa de los otros.
La gracia
es el gran secreto.
Tao 28
El que
valora la fuerza
de lo
paterno y lo materno en el hogar
se vuelve
como el profundo cauce del mundo.
Siendo el
profundo cauce del mundo,
y retorna a
la lozanía original.
Quien está
consciente de su claridad
pero asume
las habilidades de la oscuridad,
se vuelve
modelo del mundo.
y retorna
al estado original.
Quien
conoce la gloria
pero se
conserva en la humildad
llega a ser
el seno del mundo.
Siendo el
seno del mundo
poseerá la Virtud eterna en abundancia
y retornará
a la simplicidad original.
La madera
en bruto una vez cortada
sirve para
tallar objetos.
Si el sabio
obrara de este modo al gobernar
llegaría a
ser el jefe de los subalternos.
Por eso el
buen gobernante corta bien.
La lozanía
original es el edén.
Tao 29
Para aquel
que detenta el gobierno el gobierno
querer
manipularlo es el fracaso.
El gobierno
es un vaso sagrado
que nadie
tiene derecho a manipular.
Quien lo
manipula lo arruina,
quien se
apropia lo pierde.
Porque con
respecto a las cosas
unas van
delante, otras van detrás;
unas son
cálidas, otras son frías;
unas son
vigorosas, otras son débiles;
unas son
estables, otras son efímeras.
Por eso el
sabio rechaza el exceso,
la
extravagancia y la gloria.
¿Te
gobierna el que todo lo gobierna?
Tao 30
El hombre
del cielo que asesora a un gobernante
se opondrá
a toda conquista por las armas,
pues tales
procedimientos siempre traen consecuencias.
Donde
acampan los hombres de armas
sólo crecen
espinos y zarzas.
Al
reclutamiento de un gran ejército
siguen años
de penurias.
Por eso el
buen general cumple su cometido y se detiene.
No se
arriesga a la conquista.
Cumple su
cometido y no se gloría por lo hecho.
Cumple su
cometido y no se jacta de su victoria.
Cumple su
cometido y no se enorgullece de lo logrado.
Cumple su
cometido como un imperativo lamentable.
Cumple su
cometido pero no aprecia la violencia.
A todo
apogeo sigue siempre la decadencia.
Hacerse
poderoso es contrario a la luz
y todo lo
que contradice a Dios perece rápidamente.
Tao 31
Las armas
son instrumentos nefastos
que todos
aborrecen
por eso el
hombre de la luz las evita.
El hombre
noble en tiempos de paz
tiene la
izquierda por lugar de honor,
pero en
asuntos militares
el lugar de
honor es la derecha.
Las armas
son instrumentos nefastos,
no es
propio del sabio recurrir a ellas
sino cuando
sea inevitable su uso
prefiriendo
siempre la serenidad y la paz.
En la
victoria no debe haber regocijo,
porque
aquel que quisiera regocijarse
se
regocijaría de darle muerte a los hombres,
y el que se
regocija de matar hombres
no puede
reinar sobre los hombres.
En los días
fastos se considera la izquierda
como el
lugar de honor,
en los días
nefastos el lugar de honor
le
corresponde a la derecha.
En los
tiempos de guerra el teniente general
se ubica a
la izquierda,
el general
en jefe se ubica a la derecha,
en el lugar
de los ritos funerarios.
El que mate
gran cantidad de hombres
debe
llorarlos con pesar y luto.
La actitud
del vencedor del combate
debe ser la
que conviene a las ceremonias fúnebres.
Tao 32
La
luminosidad en su eternidad
es de una
simplicidad absoluta.
Pero aunque
ínfimo
el mundo no
puede someterle.
Si los
reyes y legisladores se atuvieran al evangelio
todos los
seres le respetarían.
El cielo y
la tierra se fusionarían
para
destilar un dulce rocío.
Por sí
mismo y con la mínima injerencia del gobierno
el pueblo
se ordenaría en paz y armonía.
Pero desde
que la civilización comenzó
surgieron
los nombres grandes y los egos
que
adquirieron existencia propia
y por su
naturaleza no se pueden detener.
Si la
altivez y la ofensa supieran parar a tiempo
no se
correría peligro alguno.
se puede
comparar la relación del Redentor con el mundo
a las del
arroyo de la montaña
y aguas de
los valles
con los
grandes ríos y mares.
Tao 33
Quien
conoce a los hombres es sabio,
quien se
convirtió a Dios es un iluminado.
Quien vence
a los hombres es fuerte,
quien le
permite al Salvador asear el alma es más fuerte.
Quien sabe
bastarse es rico,
quien es
decidido tiene voluntad.
Quien pone
a Jesús en el centro resiste.
En morir
sin perecer habita la longevidad perenne cierta.
Tao 34
El Verbo es
omnipresente,
pude
hallarse a la derecha o a la izquierda.
Todos los
seres le deben su existencia
y Él no los
rechaza.
Él cumplirá
su obra, las profecías.
Viste y
alimenta a todos los seres
y no
señorea sobre ellos.
Su deseo es
la redención de todos.
Todos los
seres dependen de Él
y
lamentablemente no todos le reconocen,
no se le
subordinan.
Por otra
parte el sabio
nunca asume
su grandeza,
y por eso
es grande.
Tao 35
A quien
conserva en sí la gloria,
muchas
personas acuden.
Acuden mas
el no sufre daño alguno
y permanece
en salud, paz y armonía.
El sonido
de la música y el aroma de los buenos platos
atraen al
peregrino que pasa
mas lo que
sale de la boca de Dios es férreo.
Lo miras y
quedas maravillado,
lo escuchas
y escuchas a la eternidad misma.
Su gracia
es inagotable.
Tao 36
Si quieres
que algo se contraiga
debes
primero dejar que se dilate.
Si quieres
que algo se debilite,
debes primero
dejar que se fortalezca.
Si quieres
que algo se reduzca,
debes dejar
primero que se desarrolle.
Si quieres
tomar algo,
debes
primero dar.
Esto es lo
que se llama tener claridad en lo invisible,
pues el
amor vence a la dureza y a todo.
Así como el
pez no debería ser sacado
de las
profundidades, el hombre no debería
exhibir sus
armas, su fuerza.
Tao 37
Todo lo
creado
es obra de
Él.
Si el
gobierno y ciudadanos se atuvieran a sus mandatos,
seríamos
una sociedad ordenada y en armonía.
La luz y su
sabiduría
suprimen
los deseos impuros.
Subordinados
al Creador todo es correcto.
Tao 38
El hombre
de virtud superior no se considera virtuoso,
por eso y
más posee virtud.
El hombre
de virtud inferior se considera virtuoso,
por eso
carece de virtud.
La virtud superior
testifica de sí.
La virtud
inferior testifica de sí.
La bondad
superior actúa desinteresadamente,
la justicia
que obra tiene sus propósitos.
El rito en
sí mismo es nada.
Cuando se
extravía la luz se pierde la virtud,
cuando se
extravía la virtud
se pierden
la bondad y la justicia.
La fe
indigente genera discordias.
El saber de
los antiguos profetas es conocimiento
y el
principio de todas las bendiciones.
Por eso el
sabio se atiene a la solidez de la
Palabra
y el árbol
se conoce por sus frutos.
Tao 39
Los hombres
antiguos alcanzaron a Dios.
En el
cielo, propiedad de Dios, tiene firmeza
y los hijos
del Padre tienen poder
y el vacío
alcanzado por el Espíritu tiene plenitud.
Todo lo
creado proviene de Dios, y sus seguidores
son modelos
de buena conducta y piedad al mundo.
Si el cielo
no fuese firme como una roca,
la tierra,
los hombres y todo se desgarraría.
El
evangelio es el pilar que a todo le da firmeza.
La nobleza
proviene de la humildad,
la altura
del hombre parte desde abajo.
Nadie que
brille con luz propia perdura.
Tao 40
Él hace
fuerte a los débiles.
Todas las
cosas bajo el cielo nacieron
de un Dios
increado.
Tao 41
Cuando un
sabio genuino oye hablar de Jesús,
con
diligencia se subordina a él.
Cuando un
sabio a medias oye hablar de Dios,
conserva
por un momento la luz y después se le va.
Cuando a un
idiota se le entrega un evangelio,
éste se
ríe.
El camino
claro nunca parece oscuro,
el camino
del progreso no es retrógrado,
el camino
llano se ve regular,
la virtud
suprema nunca parece vacía,
la suprema
pureza nunca parece manchada,
la virtud
cumplida muestra sus capacidades,
la solidez
de la virtud brilla sin esfuerzos,
la
verdadera rectitud no genera dudas,
el gran
cuadrado no tiene ángulos,
la música
sublime suena suavemente,
la gran
imagen carece de contornos.
El
evangelio les abre sus brazos a todos
y Cristo
sostiene y perfecciona las cosas.
Tao 42
El Padre es
Dios,
el Hijo es
Dios,
el Espíritu
Santo es Dios.
Dios es uno
y una Santa Trinidad,
y engendró
todas las cosas.
En el alma
hay luz y sombras
y a través
del libre albedrío ésta elige a su amo.
Sin el
Padre estamos
huérfanos,
abandonados y desprovistos.
El que
quiere ser ensalzado,
humíllese
delante de Él.
El que
siembra vientos
cosecha tempestades.
Tao 43
Lo blando
del amor vence a los corazones duros,
el agua del
río carcome la roca.
Lo
inmaterial penetra aun
aquello que
carece de fisuras.
El
Invisible lo doblega todo.
Todos
reconocemos el valor de Su obra.
La
enseñanza de la Palabra ,
el valor de
la acción por el otro.
Pocos son
en este mundo
los que
llegan a comprender su eficacia.
Tao 44
¿Qué es más
importante, tu salvación o tu reputación?
¿Qué es más
importante, tu vida espiritual o las riquezas?
¿Qué te
daña más, el extravío de tu alma
o la
ganancia de bienes y placeres?
Por esto,
quien se apega mucho a las cosas, sufre mucho desgaste.
Quien
atesora mucho, pierde mucho.
Quien sabe
contentarse, no cae en el deshonor.
Quien sabe
fijarse límites, no sufre daños
y está
siempre salvo y seguro.
Tao 45
Lo perfecto
parece defectuoso,
pero sus
efectos no poseen fin.
La plenitud
parece vacía o limitada
pero da de
sí sin agotarse jamás.
La
verdadera rectitud parece tortuosa,
la gran
destreza parece ineptitud,
la máxima
elocuencia a veces parece balbuceo.
El
movimiento vence al frío,
la quietud
vence al calor.
Pureza y
serenidad son la justa norma del mundo.
Tao 46
Cuando la Luz reina en la tierra
los mejores
caballos son llevados al campo
para el
acarreo.
Cuando la Luz se ha perdido en la tierra
los mejores
caballos se desvanecen
en la
guerra, en los arrabales.
No hay peor
pecado que ser indulgente
con los
propios deseos.
No hay peor
mal que ser insaciable.
No hay pero
falta que el apetito de posesión.
Por eso
quien se
sabe contentar
está siempre
satisfecho.
Cuando el
deseo personal es el gobernante,
hay pocas
esperanzas.
Tao 47
Sin salir
por la puerta
se puede
conocer el mundo.
Sin mirar
por la ventana
se puede
conocer el camino al cielo,
mediante la
fe.
Cuanto más
lejos se va sin luz
menos se
aprende.
Por eso el
sabio
sabe sin
desplazarse,
entiende
sin ver,
realiza sin
hacer.
Tao 48
Quien se
entrega al estudio de la filosofía
acrecienta
su conocimiento día a día.
Quien se
entrega a la luz del día
va
deshaciendo su inicua filosofía terrenal,
hasta
alcanzar el estado de paz interior.
En la
santidad nada queda inacabado.
El reino de
Dios se arrebata por medio de la acción,
partiendo
por la gracia de la fe.
Tao 49
El sabio
tiene sentimientos propios,
hace suyos
los sentimientos de Dios.
Con los
buenos es bueno,
con los
malos también es bueno.
Tal es la
bondad de la Virtud.
Con los
hombres fieles es fiel,
con los que
no son fieles también es fiel.
Tal es la
fidelidad de la Virtud.
El sabio
vive sereno en el mundo
y tiene
para todos un mismo corazón.
Mientras
todos fijan en él sus ojos,
él los
trata como a sus propios hijos.
Tao 50
Los hombres
salen a la vida y entran en la muerte.
Compañeros
de la vida hay tres sobre diez;
compañeros
de la muerte hay tres sobre diez;
hombres que
mueren en el ansia de vivir
hay también
tres sobre diez.
¿Y cuál es
la razón?
Porque
buscan vivir intensamente.
He oído
decir que quien sabe cuidar su vida
va por su
camino sin temor al tigre ni al rinoceronte,
entra
desarmado al campo de batalla.
El
rinoceronte no hallaría donde hincarle el cuerno,
el tigre no
hallaría donde asestarle el zarpazo,
el arma no
hallaría donde herirlo en su filo.
¿Y por qué?
Porque en
el sabio no hay nada vulnerable a la muerte:
la muerte
no lo mata.
Tao 51
Dios crea
los seres,
el medio
les da forma,
las
influencias pías los perfeccionan.
Por eso los
seres adoran al Creador
y aprecian la Virtud ,
incitados
por el Espíritu de Dios.
Así pues,
Dios engendra las criaturas
y la Virtud las nutre.
La santidad
hace crecer,
cuida,
desarrolla, conserva,
abriga y
protege.
Tao 52
El origen
del mundo
es la madre
del mundo.
Quien
conoce a la madre,
conocerá
también a los hijos.
Quien
conoce a los hijos
y se vuelve
hacia la madre
se hallará,
fuera de peligro durante toda su vida.
Quien
mantiene cerrada su boca y sus puertas
por toda su
vida estará libre de penas.
Quien abre
su boca y busca acrecentar negocios
durante
toda su vida estará sin salvación.
La madre es
un retoño del Creador.
Si en ver
lo pequeño está la fuerza de la vista,
en
mantenerse humilde reside la fuerza del hombre.
Quien usa
la luz divina para retornar a su claridad interior
será
preservado de todo daño.
A eso se le
llama el manto de la eternidad.
Tao 53
Si yo
tuviera alguna sabiduría
querría
marchar por el camino real,
esquivando
los senderos laterales.
El camino
real es seguro y fácil en el devoto,
pero los
hombres aman los senderos y atajos.
Mientas las
costumbres de la corte son suntuosas,
en los
campos proliferan las malas hierbas
y los
graneros del pueblo están vacíos.
Pero ellos
continúan vistiéndose con magníficas ropas,
ciñendo
afiladas espadas,
hartándose
de manjares y licores
y amasando
grandes tesoros.
Tales son
los caminos del bandidaje,
de la
corrupción política y religiosa,
y no los
del camino real, limpio.
Tao 54
Lo que está
bien plantado no puede arrancarse,
lo que está
bien sujeto no puede desplazarse.
Aquel de
quien los hijos y nietos guardan la memoria,
aquel no
será olvidado.
Cultiva la Virtud en tu persona
y tu vida
se hará verdadera,
cultiva la Virtud en la familia
y se hará
abundante,
cultiva la Virtud en la comunidad
y se
multiplicará,
cultiva la Virtud en el país y
prosperará,
cultiva la Virtud siempre
y se hará
universal.
Tao 55
Quien posee
la plena Virtud
se asemeja
al niño recién nacido
que la
serpiente venenosa no pica,
que la
fiera no devora,
que el ave
de presa no arrebata.
Sus huesos
son blandos y sus tendones flexibles,
pero coge
con fuerza los objetos.
Ignora la
unión de hombre y mujer
pero no
carece de estímulos,
por lo que
su virtud seminal está intacta.
Llora todo
el día
pero su voz
no enronquece.
Es la
perfecta armonía.
Quien no
pierde esa santidad alcanza la longevidad.
Quien
entiende esto es esclarecido.
De los
niños es el reino de los cielos.
Intensificar
la vida:
se dice que
en eso consiste la felicidad.
Poner
nuestras fuerzas al servicio de las pasiones:
se dice que
en eso consiste ser fuerte.
En realidad
quien emplea su máximo vigor
marcha
hacia su decadencia.
Las bajas
pasiones son contrarias a la luz,
y todo lo
que es contrario a la luz
perece
rápidamente.
Tao 56
El que no
sabe no habla,
el que
habla no sabe.
Cierra su
boca,
cierra sus
puertas,
suaviza sus
asperezas,
resuelve
sus enredos,
modera su
esplendor,
se hace uno
con el polvo.
Polvo eres
y en polvo te convertirás.
Tal es la
unión mística.
Un hombre
tal es indiferente a la alabanza y al vituperio,
es
indiferente a la ganancia y a la pérdida,
es
indiferente a la grandeza y a la humillación,
por eso es
el más noble del mundo.
La lengua
delata el estado del alma.
Tao 57
Con la
rectitud se puede hacer gobierno,
con la
habilidad se puede hacer la paz,
y sólo
obrando bien se conquista el continente.
¿Cómo sé
que esto es así?
Mientras
más reglamentos y prohibiciones hay
tanto más
se empobrecería el pueblo.
Mientras
más eficiencia hay
tanto más
sumido en el orden se halla el Estado.
Mientras
más actúa la gente con habilidad y astucia,
tanto más
signos nefastos aparecen.
Mientras
más leyes y decretos se promulgan,
tantos más
bandidos y ladrones surgirán.
Es por esto
que el sabio ha dicho:
yo me pongo
en acción
porque el
pueblo por sí mismo no evoluciona;
yo
permanezco sereno en los momentos difíciles
y el pueblo
sigue el buen ejemplo;
yo soy el
emprendedor
y el pueblo
por sí mismo prospera;
yo no me
subordino al deseo
y el pueblo
aprecia lo que es sobrenatural.
Tao 58
Cuando el
gobierno se inmiscuye bien
la virtud
del pueblo es abundante.
Cuando el
gobierno es muy politizado
el pueblo
carece de virtud.
Es en la
mala fortuna que la buena fortuna se apoya.
La mala suerte
acecha a la buena suerte.
¿Pero quién
entiende que el orden
se alcanza
tratando de poner orden con firmeza?
Pues el
desorden degenera en monstruosidad
y la buena
suerte en superstición
y por largo
tiempo el pueblo es ciego.
Por eso el
hombre sabio
es estricto
pero no tajante,
es
escrupuloso pero no hiriente,
es de
principios sobrenaturales,
es luminoso
y humilde.
Tao 59
Para
cooperar con el Cielo
en el
gobierno de los hombres
nada es
mejor que la moderación.
La
moderación permite prevenir,
previniendo
se fortalece el espíritu,
fortaleciendo
el espíritu
se está a
la altura de toda situación,
estando a
la altura de toda situación
se alcanza
una capacidad sin límites.
Cuando se
alcanza una capacidad sin límites
se está en
condiciones de gobernar el alma y el país.
Poseyendo
este embrión el buen gobierno,
se puede
durar largo tiempo.
En el bien
arraigado y sólido tronco
está la
vida perdurable y la perpetua iluminación,
que se
construye sobre esa roca que es eterna.
Tao 60
Se gobierna
un gran país
como se
fríen pececillos, con sumo cuidado.
Si el país
y el alma se gobiernan con luz
los
espíritus malignos
no vendrán
a dañar a los hombres.
No es que
los espíritus no puedan dañar,
sino que
dañan porque el sabio que gobierna
se
subordina a los mandatos del cielo.
Cuando
ambas cosas están en paz,
la virtud
original es restablecida.
Tao 61
El gran
reino es como el cauce más profundo
hacia el
cual convergen las corrientes de la tierra.
Debe
adoptar en el mundo la posición de la hembra.
La hembra
por su pasividad vence al macho
poniéndose
debajo.
Del mismo
modo si un gran reino se pone
debajo de
uno pequeño
por esa vía
se lo gana.
Por su
parte el reino pequeño rebajándose
se gana al
reino mayor.
Uno gana
por el hecho de rebajarse,
el otro es
ganado por el hecho de rebajarse.
Porque un
gran reino no aspira a otra cosa
sino a unir
y a alimentar a los hombres.
Cada uno obtiene
así lo que desea
pero es al
reino mayor a quien le corresponde rebajarse.
Y el cielo
se hizo tierra.
Tao 62
La luz
debería ser la morada de todos los seres,
el tesoro
de los buenos,
el amparo
de los perversos.
Con las
bellas palabras hasta se puede hacer comercio;
con una
conducta honorable se es recibido
siempre
como un regalo.
Pero a los
hombres que no son buenos,
¿por qué
habría que rechazarlos?
Por eso
en la
entronización de un soberano,
en el
nombramiento de los ministros,
más que
tributos de jade y caballos,
debería
ordenarse un tributo a la luz eterna.
¿Por qué
los antiguos apreciaban tanto al Creador?
Porque se
dice de él:
el que pide
recibe;
el que ha
pecado será perdonado:
he ahí que
la salvación del alma
es el
tesoro más preciado.
Tao 63
El que
practica el obrar eficaz
es
productivo en la acción.
No halla
sabor en lo insípido,
ve grandeza
en lo pequeño,
ve lo mucho
en lo poco.
Responde al
odio con la virtud,
trata lo
difícil cuando aún es fácil,
trata lo
grande cuando aún es pequeño,
porque
todas las dificultades en el mundo
comienzan
por la facilidad,
y todas las
grandezas
por la
pequeñez.
La grandeza
del sabio consiste
en subordinarse
a la voluntad del Creador.
Quien
promete con ligereza
rara
vez puede cumplir.
Quien trata
con desenfado muchos asuntos
hallará
seguramente muchas dificultades.
Por eso el
sabio
preparado
siempre para la dificultad
jamás halla
dificultades,
porque se
niega a sí mismo.
Tao 64
Lo que aún
está quieto es fácil de sujetar,
lo que aún
no se hace manifiesto
es fácil
prevenir,
lo que es
diminuto es fácil de disipar.
Enfrenta
las cosas cuando aún se hallan
en su
estado de no-ser,
establece
el orden antes de que se presente el desorden,
pues el
árbol ancho como el abrazo de un hombre
nació de un
brote ínfimo,
la torre de
nueve pisos
comenzó en
un pequeño montón de tierra,
un viaje de
mil leguas
comenzó
bajo la planta de tus pies.
Quien no
actúa daña,
quien retiene
pierde,
por eso el
sabio actúa y no daña,
nada
retiene y nada pierde,
en tanto
que la gente del mundo en sus negocios
arruina las
cosas cuando están a punto de terminarlas.
Por eso
procura cuidar tanto del fin como del principio
y nunca tus
asuntos fracasarán.
Por eso el
sabio procura estar libre de deseos,
no aprecia
los bienes difíciles de adquirir,
no se
somete a los apetitos de la carne,
aprende y
nunca deja de aprender,
vuelve
sobre lo que la gente dejó atrás,
así
favorece el curso natural de las cosas
y se
arriesga a actuar, con fe.
Tao 65
Los
antiguos que sabían gobernar según la luz
lo hacían
instruyendo al pueblo,
manteniéndolo
alejado de la ignorancia.
porque si
el pueblo se vuelve difícil de gobernar,
ello se
debe a que fue mal discipulado.
Por eso
quien gobierna por medio del saber
se vuelve
benefactor del pueblo,
quien
gobierna sin emplear el saber
se vuelve
su saqueador.
Quien
conoce estos principios
conoce la
antigua norma de gobierno.
El
conocimiento de esta norma
procede de la Virtud misteriosa.
y si bien
es distinta a todo lo conocido,
es ella la
que opera las grandes realizaciones,
mediante la
gracia.
Tao 66
Si los ríos
y los mares reinan sobre los arroyos
es porque
se mantienen siempre
en lugares
más bajos que ellos.
Esta es la
razón de por que reinan sobre los arroyos.
Por eso el
sabio
si quiere
ser el señor de su pueblo
debe
ubicarse al último.
Es así como
el sabio llega a ser eminente
sin que el
pueblo sienta siempre su peso.
Es así como
llega a ser el guía de su pueblo
sin que el
pueblo sufra daño alguno.
Es así como
el pueblo se complace en ser guiado
sin hallar
fastidiosa su guía.
Y
justamente porque el sabio no compite con nadie,
nadie puede
competir con él,
ya que es
hermano de todos.
Tao 67
La grandeza
de mi doctrina es conocida,
pero en el
ciego mundo se le considera
en algún
sentido inoperante.
Y
justamente porque es grande
es chocante
con el reino de las tinieblas,
pero
respeta el libre albedrío.
Si ella
fuera tolerante con la mundanalidad
hace tiempo
que se hubiese empequeñecido.
Tengo tres
tesoros que cuido y conservo.
El primero
es el amor,
el segundo
es la sabiduría
y el
tercero es la humildad.
Con el amor
se tiene coraje y paciencia,
el sabio es
prudente y generoso,
el humilde
puede guiar a los hombres a la paz.
Pretender
tener coraje sin amor,
ser
generoso sin ser prudente
y guiar a
los hombres sin humildad,
es marchar
hacia la muerte.
El amor es
victorioso en el ataque
e
invencible en la defensa.
Cuando el
cielo quiere salvarnos
nos protege
con ese amor que redime.
Tao 68
El buen
capitán no es belicoso.
El buen
combatiente no se deja dominar por la ira.
El buen
vencedor es aquel que evita el combate.
El buen
guía de hombres es un servidor.
Tal es su
fuerza moral que no lucha;
esa fuerza
que conduce a los hombres
y que se
asemeja al cielo,
es la más
grande de las virtudes.
Tao 69
Entre los
guerreros hay una máxima:
“Más vale
hacer de huésped que de anfitrión,
es mejor
retroceder un pie que avanzar una pulgada”.
Esto es lo
que se llama avanzar sin avanzar,
repeler sin
combatir,
enfrentar
sin hacer uso de las armas.
No hay peor
calamidad
que pecar
descaradamente.
Pecando
descaradamente
me expongo
a perder mi tesoro, mi alma.
Dos
ejércitos batallan por mi alma;
uno de ellos
es invencible.
Tao 70
Mis
enseñanzas son fáciles de entender
y difíciles
de practicar.
Pocos bajo
el Cielo las entienden
y muy pocos
la ponen en práctica.
Mis
palabras tienen muchos ancestros
y mis actos
se subordinan al Señor,
que muy
pocos conocen, lamentablemente;
lo mismo
sucede con el evangelio.
La
invariable gloria de Dios
es
independiente del número de sus devotos.
El gran
sabio usaba una túnica y era sobrio.
Tao 71
Saber que
uno no sabe
eso es
sabiduría.
Creer que
uno sabe cuando no sabe
eso es una
enfermedad.
Sólo quien
conoce esta enfermedad como tal
podrá sanar
de ella.
Si el sabio
no la padece
es porque
reconoce esta enfermedad como tal,
y por eso
está libre de este padecimiento.
Mientras
más sé, menos sé.
Tao 72
Cuando los
hombres no temen lo que deben temer,
lo más
grave puede ocurrir.
No estimes
estrecha tu casa,
ni
fastidiosa tu vida,
pues jamás
nos hastiaremos,
si no
queremos hastiarnos.
Por eso el
sabio
conoce la
naturaleza humana caída,
ama a Dios
y al prójimo,
rechaza lo
impío y toma lo de buen nombre.
Tao 73
El que es
valiente y temerario perecerá.
El que es
valiente sin ser temerario
guardará su
vida.
De estos
dos modos de actuar
uno es
beneficioso y el otro dañino.
¿Pero quién
conoce los designios del Cielo
cuando
manifiesta su hostilidad a alguien,
cuando lo
pone a prueba o lo llama?
Por eso el
sabio juzga el caso difícil.
La norma
del Cielo es esta:
vencer
peleando la buena batalla de la fe;
dar
respuestas a las angustias del alma;
atraerlos a
la luz llamándolos con amor;
actuar con
serenidad de espíritu
y discernir
los designios mediante la gracia.
La malla
del Cielo es amplia,
pero nada
se le escapa.
Tao 74
Si el
pueblo no le teme a la muerte,
¿qué se
gana intimidándolo con la pena de muerte?
Y en el
supuesto de que el pueblo
temiera a
la pena de muerte
y se
pudiera apresar a los sediciosos,
¿quién
osaría darles muerte?
Dios da la
vida y Dios la quita
e intentar
ocupar su lugar
es como
querer manejar la azuela
en lugar
del carpintero.
Rara vez se
puede hacer eso,
sin herirse
la mano.
Tao 75
Si el
pueblo padece hambre
es porque
sus gobernantes exigen demasiados impuestos.
Si el
pueblo es difícil de gobernar
es porque
sus gobernantes se entrometen en su vida.
Si el
pueblo hace poco caso de la muerte
es porque
está demasiado ansioso de vivir.
Por esta
razón el pueblo no le teme a la muerte.
En
realidad,
quienes no
se preocupan de mejorar la vida
son los que
la favorecerían.
Tao 76
Cuando el
hombre nace es tierno y débil,
y cuando
muere es duro y rígido.
Cuando las
plantas están vivas son blandas y flexibles
y cuando
están muertas son secas y rígidas.
Por eso la
dureza y la rigidez son compañeras de la muerte.
Y la
blandura y la suavidad son compañeras de la vida.
Por eso,
cuando un ejército está empecinado es derrotado
y cuando un
árbol es duro es derribado.
Lo grande y
fuerte declina,
lo suave y
tierno prospera.
Tao 77
El camino
al cielo se asemeja al arquero
que tensa
su arco.
Rebaja lo
alto, eleva lo bajo,
aminora lo
excesivo y completa lo insuficiente.
Esta es la
ruta de la santidad.
El camino
del hombre es diferente:
sustrae al
que tiene poco
para
añadirlo al que tiene en demasía.
La
concentración de la riqueza en pocas manos
es inmoral,
un problema eterno.
¿Pero quién
tiene suficiente como para dar al mundo entero?
¿para darse
por el mundo entero?
Sólo el
hombre de la luz, el Verbo encarnado.
Por eso el
sabio realiza, pero no atesora nada aquí,
cumple su
tarea pero no busca
que se le
reconozcan méritos,
porque no
desea parecer superior a nadie.
Tao 78
En el mundo
nada hay más blando que el agua,
pero en
atacar lo duro no tiene igual
y nada hay
que la supere.
Que lo
débil vence a lo fuerte,
que lo
blando vence a lo duro
todo el
mundo lo sabe,
pero nadie
puede ponerlo en práctica.
Por eso un
sabio ha dicho:
el que toma
sobre sí el lodo del reino
es el Señor
que puede oficiar el sacrificio por la tierra.
Quien toma
sobre sí las desgracias del mundo
es el rey
del mundo, el Redentor.
Esta es una
verdad suprema
que ofende
a los oídos impíos.
Tao 79
Cuando se
pone término a un pleito
siempre
queda un resentimiento.
¿Cómo puede
estimarse ése un arreglo exitoso?
Por eso el
sabio se atiene sólo a su deber
y no exige
nada a los demás.
Por eso
quien tiene virtud
atiende sus
compromisos,
y quien
carece de virtud
atiende a
sus exigencias.
El camino
del Cielo es imparcial:
le
suministra la salvación a todos los hombres
sin
desfallecer.
Tao 80
Si yo fuera
rey de un pequeño Estado
de pocos
habitantes, utilizaría el talento
que
hubiere, al máximo de su capacidad.
Que el
pueblo estuviese dispuesto a rendir dos veces su vida
en defensa
de sus hogares antes que interesado en huir.
Aunque
hubiese barcas y carros que nadie los usara.
Aunque
hubiese armas y corazas
que no
hubiese ocasión de exhibirlas.
Que el
pueblo retornara al uso de cuerdas y nudos
a modo de
escritura.
Entonces
podría hallar deliciosas sus comidas,
espléndidas
sus ropas, agradables sus moradas,
gozosas sus
costumbres.
Que las
aldeas vecinas estando tan cerca
como para
oír los cantos de sus gallos
y los
ladridos de sus perros;
la gente
muriera de edad muy avanzada
sin haber
viajado de un país a otro,
sin haber
huido de la luz.
Tao 81
Las
palabras verdaderas no son bellas.
Las bellas
palabras no son verdaderas.
El hombre
santo no discute.
El que
discute no es un santo.
El sabio no
necesariamente es un erudito;
muchos
eruditos son necios descollantes.
El santo no
acumula bienes
y cuanto
más hace por los otros
tanto más
gana para sí.
Cuando más
da a los otros,
tanto más
para sí recibe.
El camino
del Cielo te salva gratis,
el sabio
camina venciendo las dificultades, con fe,
resguardado
por la gracia divina.
Fin de EL
LIBRO DEL TAO ELEVADO
Del blog
antología LAS SOTANAS DE SATÁN.
FIN
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